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domingo, 18 de enero de 2015

Manifestación 013: Algunas fortalezas que disponemos para consolidar una fuerte identidad nacional



Para todos es conocido que para el desarrollo de una sólida identidad nacional se requiere de procesos que podrían tomar décadas e incluso siglos para conformarla y fijarla en la conciencia de los pueblos. Sin embargo, se tiene que elaborar una real planificación, con fines, objetivos y metas bien definidos, desarrollar los planes y programas nacionales tendientes a lograr los sentimientos buscados y necesarios. Evaluar y monitorear el desarrollo de dicho planes y sus resultados, tomar las decisiones orientadas a la consolidación de la tan buscada Identidad Nacional Ecuatoriana.

Como se puede visualizar, se trata de un proceso intencional, concebido con visión y seriedad, tendiente a lograr uno de los pilares fundamentales para el desarrollo y bienestar colectivo.

Pabellones nacionales de las naciones que un día conformaron la
GRAN COLOMBIA


1.              EL AMOR A NUESTRA PATRIA.  ¡ ECUADOR !

        “De los vínculos de la sociedad, el más fuerte es el de la PATRIA” [1]

Nos preguntamos qué es el amor a la patria, en qué consiste este vital sentimiento, valor humano cívico y patriótico que, todo ciudadano debería poseer y demostrar, sin miramientos, aún en las actividades y manifestaciones más simples, rutinarias y cotidianas, durante su existencia. Esta sensación superior, netamente humana, de seres civilizados, sentimiento muy ligado a la identidad nacional que, como se viene advirtiendo, el ciudadano ecuatoriano posee una débil protección, y necesita una coraza intangible; imprescindible para la supervivencia y desarrollo de los pueblos.


[1] Cicerón, Marco Tulio. Los oficios, los diálogos, las paradojas. Aguilar, A. A. Ediciones. Madrid. 1957.
Inculcar el respeto y amor a la patria en los niños y jóvenes, es vital.


El desarrollo y fortalecimiento de este valor patriótico es un proceso que demanda años, mas, si no se inicia ahora, el espíritu ecuatoriano seguiría errante, débil, pobre, por varias décadas en el futuro. Sería demasiado tarde si no se promueve inmediatamente una gran campaña nacional e individual de concienciación, liderada por la Asamblea Nacional, con la participación decidida del Ministerio de Educación y Cultura, Universidades, Fuerzas Armadas, Policía Nacional, la familia ecuatoriana, la Iglesia, los medios de comunicación social, es decir toda la sociedad, para que su consecución se constituya en el reto ecuatoriano del siglo XXI. Se propone el proyecto “Coraza”.


Fortaleciendo la identidad del pueblo (Guerrero Pasto. Tulcán)


No se tiene que recurrir a la historia universal, a la filosofía griega o al derecho romano para que en la actualidad, el ciudadano ecuatoriano, tenga que conceptuar lo que es el respeto y amor a la patria.

Por amor a la patria se debería entender todo aquel sentimiento natural y arraigado, que el ser humano exterioriza, producto de lo que su espíritu siente en las fibras más profundas de su constitución divina, el instante en el que se advierta que cualquier elemento constitutivo del país, se encuentre en peligro de ser irrespetado, maltratado, ultrajado, humillado, por algún ser o circunstancia, incluso por algún coterráneo o conciudadano inconsciente, ya por broma ya por ignorancia o peor con conocimiento y alevosía, ante lo cual se debería arremeter, precipitándose indomable a la defensa de lo que se considera propio, de la nación, del país. Sentimiento de pertenencia que obliga a salir en defensa, ante cualquier insulto o agravio, contra la existencia de lo nacional y patrio.



La victoria del Alto Cenepa, en 1995. Demostración de amor a la Patria


Se deben buscar las estrategias necesarias para que en el menor tiempo posible, se dé inicio con la gran campaña para recuperar y fortalecer el “Amor por la Patria” proceso que demandaría muchos años para que el colectivo, la sociedad ecuatoriana disponga de un sólido soporte espiritual para enfrentar con tesón, coraje y seguridad el desarrollo y producción nacional.

Este amor se lo tiene que demostrar con trabajo tesonero, con actitud decidida, con entusiasta existencia, en forma permanente y diaria. Debe ser obligación de todo ecuatoriano, en todas las edades, de toda condición social, ponerlo de manifiesto en cualquier lugar y circunstancia: en su hogar, barrio, pueblo, ciudad, escuela, colegio, universidad, oficina, fábrica, empresa, consultorio, en el cuartel, ministerios, embajadas. En fin en todo ambiente de trabajo, en el campo, en otro país, de noche, de día, en todo momento y lugar.

 
El momento es hoy, fortalezcamos nuestra identidad nacional

Ahora la pregunta es, ¿cómo saber y evidenciar si la demostración de amor a la patria es adecuadamente generada por parte de los ciudadanos ecuatorianos? Se tendría que formular todo un detalle de actividades y comportamientos exclusivos para el efecto. ¡No! bastaría tan sólo con la observación rigurosa y consciente de las normas y valores humanos que la sociedad, contempla y recomienda para su civilizada existencia.



 




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